De la bignonia del patio. Final del verano.
Cesa el calor desesperado, no decae
el deseo
-deseo por el agua y la sombra debajo de los árboles-
El ansia por la fruta abierta reventando de madurez y azúcares.
El otoño desmadeja su brisa.
Los frutos son otros. Otra la siembra.
Los frutos son otros. Otra la siembra.
Frágil la vida, así sucede.
Dejo caer las flores rosadas,
Piso los restos de lo que fue vivo y fragante,
Piso los restos de lo que fue vivo y fragante,
Barro,
Quito lo que no sirve,
Lo que molesta, lo que se pudre para
Esperar el invierno crudo, lo inevitable
Y seguir.
Quito lo que no sirve,
Lo que molesta, lo que se pudre para
Esperar el invierno crudo, lo inevitable
Y seguir.
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